Nueva vida.

      Ploc, ploc, ploc... escucho atentamente el goteo
incesante, ploc, ploc... lo sigo con mi mente repitiendolo
imnotizado como si no existiera otra cosa en este momento, solo
la gota roja deslizandose por el cuchillo, precipitandose
lentamente hacia el suelo y explotando al chocar contra el suelo
impegnado de sangre. Ploc... cierro los ojos para captar aun más
el sonido y convertirlo en una sinfonia especial, un Jazz
alborotado que se introduce por la piel excitando cada hebra de
pelo, llegando hasta los huesos mientras recorre freneticamente
todo mi cuerpo. Una sensación única, solo comparable al momento en
el que la carne se separara poco a poco para dejar introducir la
hoja afilada de mi cuchillo, sesgando tendones, cortando venas,
tocando órganos vitales, una y otra vez, creando una danza
irrepetible al son de la música de ese Jazz que se repite en mi
cerebro, acompañado de voz melódica y alentadora formada por los
gritos de dolor de mi victima.
      Salgo de mi hipnosis al cesar el goteo y la miro de nuevo,
no es tan bella como la anterior, ni siquiera se acerca al cielo
tanto como Ella, pero consigo calmar el peso que siento en mi
interior, una necesidad más fuerte que respirar o que el latir de
mi corazón, es una droga que deja tranquilo, haciendo desaparecer
la extraña sensación de vacio que he sentido siempre y me
convierte durante un tiempo en un hombre completo de nuevo.
Nunca antes pensé que fuera posible, pero en verdad a
través de la muerte he encontrado la vida.

Renacer

      Miro mis manos ensangrentadas temblando como si un frio punzante me estubiera recorriendo la espalda, observo alrededor perdido, sin saber donde fijar los ojos, buscando una solución que no existe, un por que que no encuentro, un alivio que no llega.
      Ella era perfecta, sus labios carnosos, sus mejillas suaves, sus cristalinos ojos verdosos, su pelo rizado, su tentador cuerpo... perfecta. Mi corazón se maravillaba con su belleza, mis ojos se cegaban con su esplendor y mi mente la deseaba mas por cada segundo que pasaba con ella.
      Dios liberame, liberame de este momento, siento como me comprimo por dentro, como mi mente esta a punto de explotar, me echo las manos a la cabeza y aprieto con intensidad buscando un dolor que acabe con todo, intentando que mis dedos entren en mi cerebro para arrancar el sufimiento con mis propias manos y se quede todo en silencio, silencio... silencio... ( )...
      Silencio, no hay nada a mi alrededor, solo oscuridad y un reflejo de mi, un fantasma inmovil en mitad vacio acurrucado en el suelo, con las manos recogiendo las piernas y la mirada fija al frente, solo con un estridente susurro que se repite una y otra vez, quebrando mi voluntad, destruyendo cada resto de pensamiento, quemandome mientras se hace mas intenso, destripando un parte de mi creandome un dolor tan intenso que solo puedo gritar de forma inhumana hasta que todo se rompe y llega la calma.
      Poco a poco vuelvo a ver color, el color rojo de la sangre del suelo que se mezcla con mis lagrimas, la sangre que mancha las paredes, mi ropa, mi cara, mis manos, sangre que procede de ella; era tan perfecta... ahora miro de nuevo su cuerpo inerte y veo su verdadera belleza, un angel que ha bajado a la tierra solo para saciarme, un don concedido por Dios. Toco su cuerpo frio, tenso, muerto y tiemblo como si un frio punzante me recorriera la espalda, entonces miro mis manos ensagrentadas y me pregunto por que, por que no lo hice antes.